Despierta la frescura de tu piel con una rutina facial imparable. Tanto si eres amante del maquillaje como si prefieres lo natural, la polución y las impurezas afectan a todos por igual. Descubre los secretos para una higiene facial perfecta: oxigena tu piel, reduce los poros, equilibra el pH y di adiós a los puntos negros. Además, no olvides dedicar especial atención a tus ojos con una técnica fácil para desmaquillarlos y evitar esos molestos ojos de panda. Prepárate para el primer paso hacia una piel radiante y no te pierdas el siguiente capítulo: la hidratación. Tu piel te lo agradecerá con un brillo saludable y una sensación rejuvenecedora.
No importa que no te maquilles, limpia tu piel. La polución, el sudor, el sebo, las células muertas y las bacterias ensucian tus poros. Hazlo cuando te levantes y antes de dormir.
La higiene es el mejor pulmón celular. De la misma manera que necesitamos oxígeno para respirar, la piel también lo necesita para mantenerse saludable y con brillo. La contaminación, el estrés, la falta de deporte, la falta de horas de sueño o la limpieza incorrecta provocan una pérdida de oxígeno en la dermis. Si limpias y desmaquillas tu piel a diario, ayudarás a que tu piel esté más oxigenada.
Y, ¿qué son los poros exactamente? Los poros son las aberturas por donde salen los folículos pilosos. Cada poro contiene su propia glándula sebácea que produce grasa o sebo. La piel necesita el sebo para permanecer bien hidratada y protegida. Pero también son un lugar propicio para la acumulación de residuos y bacterias y por eso, deben estar limpios.
El pH de la piel es uno de los mecanismos protectores clave. El valor óptimo de pH de la piel en la mayor parte del rostro ronda entre 4,7 y 5,75. Un pH de 7 (el que tiene el agua pura) es considerado neutro. Los valores por debajo son ácidos y los valores superiores son alcalinos. Habrás deducido que el pH natural de la piel es ácido, para ser más exactos es ligeramente ácido. Por este motivo, puede neutralizar los agresores de base alcalina (como los detergentes abrasivos), inhibe el crecimiento de bacterias, y restaura y mantiene el ambiente ácido óptimo para mantener el microbiota de la piel saludable. Si el pH de la piel aumenta hacia el rango alcalino, el balance natural se altera, impidiendo la síntesis de los lípidos epidérmicos esenciales lo que provoca que la piel se deshidrate por la pérdida de agua.
¿Qué son los puntos negros? Se trata de una leve obstrucción de los poros causada por el propio sebo de la piel, por el acúmulo de células muertas y por partículas de polución, maquillaje o residuos de otros productos. Su color es negro porque se oxidan al contacto con el aire
Eliminar las células muertas es uno de los pasos más importantes de la limpieza que necesita nuestro rostro.
Seguro que has oído hablar del microbiota intestinal, pero ¿sabías que existe también un microbiota en la piel y que es clave para mantener una piel saludable? El microbiota cutáneo junto con el manto hidrolipídico, forman un ecosistema complejo que ayuda a mantener tanto la hidratación como la elasticidad de la piel. Además, junto con la propia grasa de la piel y el sudor crean un ambiente ácido que impide que los patógenos puedan atravesar la capa más superficial de la piel.
Te explico cómo hacerlo a continuación. ¿Tienes ya papel y lápiz? ¡Toma nota!
La piel se purifica constantemente eliminando células muertas, residuos metabólicos y suciedad de manera natural, gracias a diferentes enzimas. No obstante, debido a la exposición de la piel a la suciedad ambiental, a la polución y al maquillaje, usar sólo agua no es suficiente para limpiar en profundidad la piel.
Por eso, utiliza Jabones Syndet*: “jabones sin jabón”, con pH 5.5 porque van a ser más respetuosos con el manto lipídico de tu piel. Si utilizas esponja, te recomiendo que sea muy suave y que el agua esté templada, entre 25-30 grados, nunca caliente para evitar irritar la piel.
Si además has utilizado maquillaje debes retirarlo antes de realizar la limpieza y lo ideal es utilizar lociones micelares que son menos agresivas, que limpian en profundidad, equilibran el pH, evitando la irritación e hidratan y tonifican la piel dejándola suave y tersa.
No frotes tu piel, sécala con pequeños toquecitos, suaves pero profundos para estimular la producción de colágeno y elastina, al mismo tiempo que favoreces el drenaje linfático.
Si no sabes qué es un “jabón sin jabón”, aquí tienes la respuesta:
*Jabones Syndets: “Synthetic Detergent” en inglés. Hacen referencia a los jabones cosméticos elaborados con detergentes sintéticos tensoactivos. Te preguntarás si un jabón “sin jabón” puede limpiar. La respuesta es sí. Se trata de productos de limpieza mucho más suaves y respetuosos con el manto lipídico de tu piel con un pH afín a la piel.
Presta atención a tus ojos y tus pestañas. No te olvides de incluirlos en tu rutina de limpieza.
¿Alguna vez has pensado en todas las impurezas que pueden llegar a tus ojos y que son detenidas por los párpados y las pestañas?
Al estar expuestos al medio ambiente y a la contaminación, tus párpados son la barrera de protección más importante que tienen los ojos. Imagínate todos los agentes que pueden llegar a afectar tus ojos: el viento, el polvo, la lluvia, el sudor, pequeñas partículas que están en el aire y que si no tenemos accesorios de protección llegan directamente a tu piel.
La piel de tus ojos es una piel muy sensible y fina con unas características diferentes al resto de tu rostro por lo que te recomiendo utilizar cosméticos especiales para tus párpados y pestañas.
Cuando hablo de desmaquillar las pestañas me viene a la cabeza mi imagen en el espejo algunas mañanas... reconoce que tú también te has levantado con ojos de panda alguna vez, ¿a que sí? Eso nos ocurre porque no retiramos bien la máscara de pestañas, vamos con prisa o con sueño, o con las dos cosas...
Voy a contarte cómo realizar una correcta limpieza de tus párpados y pestañas de una manera fácil y rápida.
Y hasta aquí el primer paso de tu rutina facial: la LIMPIEZA. Espero que te haya resultado fácil y lo incorpores a tu día a día conociendo las ventajas de hacerlo correctamente. Tu piel es muy importante y debes cuidarla.
Lee mi próximo post en el que te cuento el segundo paso de tu rutina facial: la HIDRATACIÓN.
Nos vemos en el camino.