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Nutrición

Consejos prácticos para afrontar: Diarrea

En esta serie de artículos te damos las recomendaciones prácticas necesarias para afrontar algunos de los efectos secundarios más habituales durante el tratamiento. La diarrea es uno de los efectos más incómodos de llevar, ya que afecta directamente a tu calidad de vida y al ritmo normal de tu día a día. Estas recomendaciones te ayudarán seguro, y servirán de guía práctica.

La diarrea es otro de los efectos secundarios más frecuentes de los tratamientos oncológicos. Se denomina diarrea al aumento en la frecuencia de las deposiciones (más de 3 al día) acompañada de una disminución en su consistencia. Pueden ser heces blandas, semilíquidas o líquidas.

Se puede producir por tratamientos sistémicos como la quimioterapia (fluorouracilo, irinotecán, capecitabina, taxanos, antraciclinas, cisplatino y carboplatino…), las terapias dirigidas (gefinitib, erlotinib, afanitib, cetuximab, panitumumab, lapanitib, trastuzumab, verburafenib...),  las terapias hormonales (enzalutamida, abiratenona) y la inmunoterapia (anti-CTLA-4); y por tratamientos locales como la radioterapia en abdomen o  pelvis o la cirugía gastrointestinal.

Suele ser pasajera y de intensidad leve-moderada, aunque limita mucho en el día a día, así que vamos a ver ¿qué puedes hacer?

Recomendaciones dietéticas generales

  • Asegúrate de mantenerte muy bien hidratado (2-3 L si no hay contraindicación). Bebe líquidos en pequeñas cantidades de forma regular. Puedes tomar infusiones (té de canela), o prepararte una limonada alcalina.

Receta de la limonada alcalina: 1l de agua + una cucharada sopera de azúcar + el zumo de un limón+ una punta de cucharita de café de bicarbonato + una punta de cucharita de café de sal.

  • Si la diarrea es moderada o intensa toma suero de rehidratación (Sueroral Casen®) para reponer las sales. No bebas agua de forma exclusiva.
  • Evita los refrescos y los zumos de futas azucarados, el alcohol, y el café. Evita productos endulzados con sorbitol (cuidado con las bebidas dietéticas, los chicles y caramelos sin azúcar)
  • Realiza comidas frecuentes y poco copiosas
  • Consume los alimentos a temperatura ambiente, evita las temperaturas extremas.

¡Prepara tus recetas!

  • Se toleran bien los consomés, purés de patata y zanahoria, el arroz cocido o en sopa y la tortilla francesa.
  • Prepárate cremas ricas en fibra soluble. Utiliza calabacín, lentejas, calabaza, zanahoria, patata... añade pescado blanco o pollo.
  • Evita consumir alimentos que contengan fibra insoluble como: los integrales, semillas, frutos secos, algunas frutas (fresa, frambuesa, caqui, higos, coco…), judías blancas, garbanzos, salvado de trigo o maíz…

Curiosidad: Conocer los diferentes tipos de fibra, y dónde se encuentra cada una de ellas, es muy interesante ya que suelen estar en distintas proporciones en un mismo alimento. Hablaremos de la fibra más adelante.

  • Como proteína, incorpora carnes blancas sin piel (pollo o pavo), huevos cocidos, tofu o pescado hervido.
  • Puedes tomar pan blanco tostado.
  • Evita las frutas y verduras crudas, mejor cocidas o asadas. Consume la fruta sin piel ni semillas. Muy recomendable la manzana.
  • Potencia el consumo de plátano maduro.

Curiosidad: la aportación de fibra soluble o insoluble del plátano varía en función de su madurez.  Cuando está maduro el aporte de fibra soluble es mayor, por lo que es perfecto si tienes diarrea, por  el contrario,  no recomendamos su consumo si está verde.

  • Consume membrillo.
  • Evita la leche entera, toma mejor yogures desnatados.
  • Evita los fritos, las grasas, los picantes y los alimentos flatulentos como las crucíferas (brócoli, coles, berza...).
  • Puedes usar la raíz de kuzu en sopas, cremas, purés o en tus infusiones. Añádela a tus platos en los dos últimos minutos de cocción.

Curiosidad: el kuzu es una de las plantas utilizadas en la medicina china tradicional y gracias a las isoflavonas que contiene, es un gran regulador del tránsito intestinal. Advertencia: No se recomienda su consumo a los pacientes con tumores hormono dependientes como mama, próstata y ginecológicos.

  • La mejor forma de cocinar: al vapor, hervido o al horno a menos 180º

Para complementar nuestras recomendaciones, pregúntale a tu oncólogo si puedes tomar probióticos con Lactobacillus y Bifidobacterium.

Referencias

  • Carmona Bayonas A, Jiménez Fonseca P. Cuidados continuos: Cuidados de soporte y paliación [Internet]. Sociedad española de Oncología médica; 20 Febrero 2023 [ Consultado 31 julio 2023]. Disponible en: https://seom.org/guia-actualizada-de-tratamientos/cuidados-de-soporte
  • Martin Peña G. Dieta y cáncer. En: SEOM. Sociedad española de  oncología médica. Soporte nutricional en paciente oncológico. Madrid: You & Us S.A; 2002. 115-131.